Chicas, va por nosotras. El arte griego buscaba y, sin duda, conseguía la perfección.
Este pórtico del Erecteion me maravilló desde que hace muchos años lo descubrí en los libros de texto.
Hoy día lo veo con otros ojos, y aparte de su incomparable belleza y de lo sorprendente que puede resultar la sustitución de las columnas por las elegantísimas korai (muchachas), para mí simboliza (seguro que el escultor no compartiría mi opinión) lo que tantas y tantas mujeres han hecho a lo largo de la historia: sostener una pesada carga y, a la vez, seguir manteniendo el tipo.
Hoy día lo veo con otros ojos, y aparte de su incomparable belleza y de lo sorprendente que puede resultar la sustitución de las columnas por las elegantísimas korai (muchachas), para mí simboliza (seguro que el escultor no compartiría mi opinión) lo que tantas y tantas mujeres han hecho a lo largo de la historia: sostener una pesada carga y, a la vez, seguir manteniendo el tipo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario